¡Maneras sencillas para sobrellevar la menopausia!
Las vitaminas del grupo B ayudan a compensar los episodios de fatiga menopáusica. Un buen suplemento de vitamina B, reducir la cafeína y una dieta equilibrada de azúcar en sangre deberían evitar los sofocos y las molestias de la menopausia.
Considerando que casi todas las mujeres pasan por la menopausia, es asombroso cuántas mujeres están poco preparadas para este momento en sus vidas. Para la mayoría de las mujeres, la premenopausia (fase inicial de la menopausia) empieza alrededor de los 50 años, pero en algunas empieza a los 45 y en otras no llega hasta los 55.
Aquellas que se ponen al día y hacen un esfuerzo en hacer algunos cambios en su dieta y estilo de vida alrededor de los 40 años tienen más probabilidades de experimentar una menopausia más leve, corta (4 años) y manejable.
Sin embargo, aquellas mujeres que esconden la cabeza bajo el ala y no hacen nada probablemente tengan una menopausia mucho más larga (10 años) y problemática, llegando a intervenir con su vida cotidiana.
Cambios hormonales
Durante la menopausia los ovarios dejan de producir estrógeno, progesterona y testosterona. Esta fase tiende a ser un poco accidentada y hay días en los que los niveles de hormonas descienden en exceso sin razón aparente, causando que la glándula del hipotálamo se estrese.
La glándula del hipotálamo está a cargo del termostato interno y el estrés causado por la caída de los niveles de hormonas crea disturbios, lo que causa que el hipotálamo crea que el cuerpo se sobrecalienta y reacciona provocando sofocos, sudores y sudores nocturnos en un intento de enfriar el cuerpo.
Niveles de energía fluctuantes
Estas fluctuaciones de estrógenos y progesterona también afectan al metabolismo, la función tiroidea y los sistemas de energía, que a menudo crean días de fatiga inexplicable y extrema. Este tipo de fatiga no se resuelve con descanso o sueño, lo que hace que incluso las tareas más pequeñas sean demasiado abrumadoras y extenuantes, y hacen que la vida cotidiana necesite una pausa.
Hay varios factores dietéticos y de estilo de vida como beber mucha cafeína y alcohol y ser inactivo, que pueden hacer que estos días de fatiga se pronuncien.
Cambiar el café por tés de hierbas, reducir el consumo de azúcar y volverse más activo o participar en clases de gimnasia son pasos en la dirección correcta.
Vitaminas del grupo B al rescate
Si hay un grupo de vitaminas que pueden ayudar a recargar y reiniciar la energía, sin duda son las vitaminas del grupo B. Estas vitaminas actúan como cofactores en las reacciones enzimáticas que convierten los carbohidratos de nuestros alimentos en unidades de energía llamadas ATP que todas nuestras células pueden usar.
El problema es que el cuerpo no puede almacenar estas vitaminas ya que son solubles en agua, por lo que necesitamos una buena ingesta diaria para mantener nuestra energía y metabolismo encendido.
Las vitaminas del grupo B son principalmente carbohidratos complejos o no refinados como el arroz integral, pan integral, cereales integrales y las legumbres. Si se opta por carbohidratos refinados como el arroz blanco, pasta blanca, pan blanco, galletas, pasteles y cereales azucarados es posible que no se obtengan las vitaminas del grupo B necesarias para esta fase de la vida, dejándole vulnerable a episodios de fatiga menopáusica.
Vitaminas liposomales del grupo B
Una de las formas más inteligentes de darle al cuerpo un gran impulso de vitaminas del grupo B es tomar un suplemento que contenga una forma liposomal de vitaminas del grupo B como el complejo de vitamina B de Altrient.
Este producto altamente biodisponible supera a muchos otros productos del complejo B debido a su formulación de alta calidad, sistema avanzado de administración liposomal y nutrientes de apoyo cuidadosamente seleccionados: cromo, selenio y zinc.
Es el factor liposomal el que ayuda a transformar estas vitaminas esenciales en un suplemento fácil de absorber y de acción rápida que alcanza de manera rápida y eficaz las células corporales cansadas y agotadas.
Además, las vitaminas del grupo B también son importantes para un estado de ánimo, mente y memoria saludables, que también son vulnerables a medida que avanza la menopausia.
Escrito por Susie Perry Debice